jueves, 26 de julio de 2012

La derrota de Nelson y sus consecuencias para San Andrés

Todos, quien más y quien menos, sabemos algo de la increíble y tan cantada derrota de Nelson por los tinerfeños (¿quién no hizo la ruta de los castillos o visitó con el colegio el Museo de Almeida?). Pero, ¿y sus consecuencias?

Y no me refiero a que muchos dicen que mejor nos hubiera ido siendo ingleses, sobre todo con la que está cayendo. Me refiero a las implicaciones derivadas que tuvo este hecho para el pueblo de San Andrés, positivas o negativas según la interpretación de cada cual.

Veamos lo que sucedió después de la marcha de los ingleses:

Gracias a la derrota, el rey Carlos IV, quien había declarado la guerra a Inglaterra, concedió en 1803 a Santa Cruz de Tenerife el privilegio de emanciparse de La Laguna (único municipio de la Isla por aquél entonces). Así, Santa Cruz se convirtió en “villa exenta”, y como consecuencia se le dio poder para delimitar su jurisdicción, siempre y cuando no usurpara la de la Capital (La Laguna). Pero la clase gobernante santacrucera, reprimida y maltratada por los laguneros durante décadas, aprovechó ciertas lagunas en la Real Cédula para extender sus límites hacia el territorio de San Andrés, intentándolo también hacia el valle de Güímar.

San Andrés era entonces dependiente de La Laguna, pero contaba con cierta libertad administrativa desde 1518 y con jurisdicción eclesiástica propia desde 1747, por lo que su anexión por parte de Santa Cruz revestía carácter fraudulento, al atentar contra los derechos de La Laguna.

Empezó así la relación administrativa entre Santa Cruz y San Andrés, con un fraude. Saque cada cual sus conclusiones. Yo lo tengo claro…

Como último dato para poder ver todo el conjunto, decir que muy contentos no debieron estar nuestros antepasados con el novísimo ayuntamiento chicharrero, pues diez años después y amparado en "La Pepa", nuestro pueblo se constituyó en municipio independiente…

Lo que sucedió después, es otra historia…
 Beneharo Hdez.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Según el historiador y amigo Agustín Guimerá Ravina la incursión de Nelson en Tenerife no fue con el objetivo de conquista, sino una justificación para que Inglaterra firmara la paz con España,y así sucedió.Se consideró como un ataque corsario, y lo argumenta de una manera convincente. De tener Inglaterra otra intención los efectivos hubiesen sido distintos,y la acogida de los supuestos derrotados también, porque todo sucedió como si hubiese sido un accidente.¡Ah! Cuando se mencionan hechos de este tipo,si no se es el autor,hay que mencionar las fuentes por razones obvias.

Anónimo dijo...

Me temo que todavía queda mucha pedagogía que hacer acerca de las intenciones de Nelson y por supuesto de las consecuencias de su derrota.
Lástima que no nos quitemos la venda e los ojos que durante años nos han ocultado la realidad.